martes, 27 de noviembre de 2012

El reto pedagógico de vincular la docencia y la Investigación en el espacio del aula



 Problematización

El alumno recibe información, acumula teoría, pero no es capaz de usar crítica y pertinentemente dicha teoría, tampoco de pensar por sí mismo y de tomar posición frente al propio conocimiento. El profesor generalmente asume el papel protagónico y los alumnos de escuchar y asumir, desapareciendo así la opción primordial del diálogo en el acto de enseñar y aprender
el conformismo en el alumno convirtiéndolo en lo que el doctor De Zubiría llama “un pasmado mental”,  
En esta perspectiva, la docencia no consiste únicamente en transmitir conocimientos, sino en despertar en el alumno el deseo y la alegría por aprender; crear en su alma un vínculo afectivo con los otros que le rodean; desarrollar al individuo desde adentro; y entender que no se puede enseñar a las masas y en serie porque todos somos diferente
La verdadera docencia es aquella que propicia que el alumno se forje la necesidad de aprender por su cuenta y encontrar en el profesor un guía, un acompañante para llegar al conocimiento. 
El aprendizaje de conocimientos, de actitudes y de buenas formas de comunicación no están reñidas
Su misión es la de proporcionar las situaciones y experiencias que permitan el logro de los conocimientos, para el desarrollo académico y el ejercicio profesional, en un ambiente de relación interpersonal que facilite una identidad adecuada 
La mayoría de los teóricos de la educación plantean el problema del miedo que viven los estudiantes –y el maestro- cuando se presentan situaciones de aprendizaje diferentes, digamos alternativo; los primeros en pedir la vuelta al sistema conocido son los mismos estudiantes, temerosos de la novedad que implica encontrarse con la posibilidad de aprendizajes no sólo intelectualizados, sino aquellos que les modificarán realmente su propia vida. se puede afirmar que la transformación académica de toda institución de educación superior pasa necesariamente por una docencia renovada y por un docente innovador, formado en una doble perspectiva: la disciplinaria y la pedagógico-didáctica. 
La docencia, una tarea profesional compleja
la docencia se concibe, más que como transmisión, como un proceso complejo donde interactúan una diversidad de elementos, entre ellos, de manera destacada, la información y la relación pedagógica entre profesores, estudiantes y otras instancias académicas, donde la atención se centra en los procesos de diversos aprendizajes, conocimientos, habilidades, destrezas, actitudes, valoresNivel de dedicación
Nivel de dedicación
Esto implica que esta misma actividad constituya la principal fuente de ingresos, de interés y vocación profesional. 
Nivel de una formación especializada 
como el conjunto de conocimientos y habilidades específicas de un área o disciplina 
En relación con la investigación: como binomio inseparable de ésta con la docencia, en la perspectiva de enseñar lo que se investiga e investigar lo que se enseña
Nivel de inserción institucional más amplia: como la realización de las tareas académicas que desembocarán en servicios concretos 
En relación con la sociedad: como actividad consciente de la función social de la universidad en el sentido de orientar sus programas y actividades a la satisfacción de las necesidades y requerimientos de la comunidad. 
La docencia y la investigación en la apropiación y/o construcción del conocimiento.
Estos conocimientos no se producirán satisfactoriamente a no ser que se ofrezca una ayuda específica que propicie la participación del alumno en actividades intencionales, planificadas y sistemáticas que logren promover en éste una actividad mental constructiva.
*El alumno es el responsable último de su propio proceso de aprendizaje.    
*La actividad mental constructiva del alumno se aplica a contenidos que poseen ya un grado considerable de elaboración. Esto quiere decir que el alumno no tiene en todo momento que “descubrir” o “inventar” en un sentido literal todo el conocimiento escolar. 
*La función del docente es engarzar o conectar los procesos de construcción del alumno con el saber colectivo culturalmente organizado.  
 Más aún, se diría que al alumno hay que enfrentarlo con situaciones y experiencias que enseñen formas de construir el pensamiento; con estrategias didácticas que desarrollen y develen lógicas de pensar que lleven a los descubrimientos, que problematicen el conocimiento, antes que consumir diversos libros o usar redes electrónicas con mucha información, pero que en el mejor de los casos se le indigesta teóricamente en lugar de ejercitar la inteligencia.
Sentido pedagógico de la investigación
Por ello, si la docencia universitaria se aleja del sentido intrínseco de la investigación, sólo transmite conocimientos legitimados y acabados, posición que entiende al conocimiento como algo dado y acabado y no la experiencia misma que le dio origen. Conocer a nivel superior es saber un qué y un cómo llegó a ser descubierto algo, pero además un para qué.

Separar la docencia de la investigación es quitar al acto de aprehender la oportunidad de conocer el proceso de hallazgo y el sentido de su finalidad, además de no haberle ofrecido al educando una verdad unilateral y con ello propiciarle un conocimiento estéril, ya que se le priva del poder fecundo de asimilar y hacer propia una estrategia de aprendizaje para crear y recrear nuevos conocimientos en otras situaciones educativas acaso inéditas.
Conviene tener presente que de acuerdo con el marco legal del Estatuto de Personal Académico que fundamenta la estructura académica de la UNAM queda de alguna manera normada una distinción, más no una separación de las funciones de docencia e investigación en su trabajo académico, aunque silencia la importancia de su vinculación.
    La investigación DE la docencia coloca a ésta como un objeto de conocimiento
A la investigación PARA la docencia se le entiende como la propuesta de acciones reflexivas sobre el quehacer docente, propuesta que insiste, entre otros, en la formación del maestro a partir del análisis de su práctica. Implica un acceso a la administración del saber 
La llamada investigación COMO docencia representa un camino para introducir al alumno al quehacer de la indagación y es concebida como una aproximación a los procedimientos de la investigación en sus múltiples manifestaciones o como el proceso para la propuesta de soluciones a problemas diversos.   
La Docencia en Forma de Investigación: una alternativa deseable y posible.
La docencia en forma de investigación consiste simplemente en aplicar las estrategias, procedimientos y técnicas de investigación en el aprendizaje por descubrimiento y practicar las habilidades intelectuales del investigador en la búsqueda del conocimiento y los métodos básicos de la información necesaria dentro de una rama del saber.
La problematización la entendemos, siguiendo a Ricardo Sánchez Puentes, como un cuestionamiento radical del ser y actuar del profesor universitario.   
En este sentido, el profesor que se asume como investigador es distinto al repetidor de consignas, al profesor anquilosado y al sectario, no tiene que ver nada con el doctrinario; el problematizador es un científico, no un catequista ni un instructor; es un técnico, no un fanático ni un domesticador




La meta primordial de la docencia renovada procura realizar un hábil desarrollo de aquella conciencia de la manera de aprender, la cual no se orientaría en primer término hacia el abordaje de determinados objetos de estudio, sino hacia el desarrollo de la habilidad de enseñar a aprender. Éste es, quizá, el mayor desafío que enfrenta el docente universitario y no universitario tanto en su proceso formativo como en su práctica concreta.




El reto pedagógico de vincular la docencia y la Investigación en el espacio del aula